Las Triplicidades
En la astrología de la Antigüedad, poseían más bien una naturaleza estacional, por lo que a una estación se le daban las cualidades de un elemento; así, los signos asociados a esa estación serían asignados a ese elemento.Los elementos estacionales de la astrología antigua eran los siguientes:
Primavera (húmeda, cálida): Aire - Aries, Tauro, Géminis
Verano (cálido, seco): Fuego - Cáncer, Leo, Virgo
Otoño (seco, frío): Tierra - Libra, Escorpio, Sagitario
Invierno (frío, húmedo): Agua - Capricornio, Acuario, Piscis
Emplear las cualidades estacionales da cuenta de las diferencias en las manifestaciones entre signos del mismo elemento. Todos los signos de fuego son, por naturaleza, cálidos y secos. Sin embargo, la adición de las cualidades elementales de las estaciones resulta en diferencias entre los signos de fuego.
A ser Leo el signo de mediados de verano, recibe una dosis doble de naturaleza cálida y seca, y es el signo de fuego puro; pero Aries, al ser un signo de primavera, es más húmedo (cálido y seco, cálido y húmedo), y Sagitario, por ser un signo de otoño es más frío (cálido y seco, frío y seco). En el hemisferio sur, el ciclo estacional se invierte.
Esta tabla refleja los elementos secundarios y terciarios para cada signo. En astrología moderna no se les da demasiada importancia a estas asociaciones, aunque son prominenetes en magia ceremonial occidental moderna, neopaganismo, druidismo y el culto wicca.
Jose L. Molteni